Bueno, voy a explicar un poco el funcionamiento del juego, que es muy sencillo:
En Ars Universalis representamos mecenas que invierten sus fortunas en respaldar a personajes históricos (grandes pintores, escultores, músicos, escritores o científicos). Cada uno de estos personajes viene con un puzle único, que al completarlo nos proporcionarán Puntos de Prestigio Artístico y más dinero, que podremos volver a invertir en los nuevos personajes y en comprar cartas de materiales. Por ejemplo, aquí vemos dos personajes de la Edad Contemporánea (Wagner y van Gogh):
¿Qué son las cartas de materiales? Como decía, cada personaje viene con uno o más puzles únicos, dependiendo de la rama del arte o la ciencia que cultivase el personaje. Estos puzles se resuelven combinando cartas de materiales, que son unas cartas que contiene cada una de ellas un trocito de cada uno de los puzles. No todas las cartas de materiales nos valdrán para los puzles que tengamos y algunas nos serán más útiles que otras. Hay 5 tipos de puzles, uno por cada rama del arte y el conocimiento presente en Ars Universalis. Aquí vemos algunas maneras de combinar las cartas de materiales, la primera para resolver un puzle de pintura y la segunda para resolver uno de música
El juego se prolonga a lo largo de 3 épocas, desde la Edad Media hasta la Edad Contemporánea. Los personajes irán apareciendo en una subasta al principio de cada ronda, donde tendremos que pujar por los que más nos interesen. Tendremos además que intentar que nuestros oponentes acumulen muchos artistas de un mismo tipo, ya que esto les proporcionará puntos de prestigio adicionales.
El juego es sencillo, pero muy entretenido. Hay interacción en la parte de las subastas y luego tienes que gestionar bien tus cartas de materiales para ser lo más eficiente posible al resolver las obras de tus personajes, porque las cartas que usemos las deberemos devolver al mazo. La partida se termina cuando alguien alcanza los 75 puntos de prestigio y suele durar entre 45 minutos y una hora.
Hemos querido crear un juego divertido, que sea capaz de picar a los jugones habituales, pero a la par capaz de servir para iniciar a nuevos jugadores e incluso a los más pequeños de la casa, que podrán aprender algo con todos los personajes históricos que aparecen.