Hace dos años empecé a investigar en serio las posibilidades de la impresión 3D, y a pesar de que han transcurrido dos generaciones de estas máquinas, aún es pronto para usarlas en juegos de tablero... si no eres una megacompañía.
Es un mundo aparte, repleto de nuevas problemáticas (materiales, averías, roturas, imperfecciones, etc) y que exige un planteamiento productivo diferente.
a)
Modelo tradicional: molde metálico caro (resina más barato) pero repartes el coste entre las unidades (contra más haces, más baratas te salen)
b)
Modelo impresión 3D puro: no hace falta molde, así que pagas la unidad a un precio fijo, hagas una o mil
Yo he optado por la fórmula más extendida, que no la más barata: un
modelo híbrido. Haces prototipos en impresión 3D hasta dar con el bueno (esta es la ventaja principal), lo refinas artesanalmente, haces un molde de silicona y a producir hasta que se rompa.
Para muestra mi Dragón Dorado, que podéis ver en este álbum como modelo 3D, en la impresora, una vez "destetado" de la máquina, como busto refinado en resina blanca técnica y el final pintado.
https://www.facebook.com/media/set/?set=a.721988244487760.1073741836.476445255708728&type=3Fabrican, mis colaboradores de Slinger Studios (
http://www.slingerstudios.com)