Ciudadelas es un gran juego. La nueva edición de Ciudadelas me parece un completo error y un producto muy inferior a la primera y segunda ediciones.
Reglas actualizadasEste es un chorrijuego de gameplay caótico, no necesita un equilibrado exhaustivo como los juegos asimétricos competitivos, así que está claro que los cambios de reglas que incluya no son para mejorar su gameplay, sino para darles una justificación a los antiguos compradores de que vuelvan a pasar por caja.
¿Qué reglas han cambiado? Ahora hay tres sets de personajes, debiendo elegir 1 personaje entre 3 para cada etapa de la ronda (el juego base sólo traía un set y la expansión ofrecía un set adicional). Uno de los personajes de la expansión, el recaudador, se ha retocado. Muchos distritos morados se han retocado o eliminado.
He jugado a Ciudadelas hasta quemarlo, y nunca me pareció que ganase rejugabilidad con nuevos personajes. Crea ciertas diferencias, pero el juego se mantiene más o menos igual. Los personajes de la expansión nunca nos gustaron mucho ni nos supusieron una novedad más allá de la primera partida, así que tener aún más personajes no me parece atrayente. No considero que los nuevos personajes sean una mejora.
Si el cambio de reglas es que han eliminado distritos, si quieres aplicar la nueva versión es tan fácil como eliminar esos distritos del juego original. Varios distritos han sido eliminados porque tenían efectos sólo con personajes básicos (que si se reemplazan, dejan de tener sentido).
ArteLa primera cagada es que el nuevo arte, sin ser malo, tiene mucha menos personalidad y está mucho más industrializado que el arte original, que resulta más expresivo y artístico, con lo que el rediseño gráfico me parece innecesario y un paso hacia atrás.
Arte original. El ladrón es precavido, el mago está loco, el mercader tiene cara de usurero y el arquitecto tiene cara petulante.
Nuevo arte. Cabezas más grandes, proporciones más rígidas, expresiones faciales sutiles. Ténicamente correcto. También políticamente correcto: nuestra ciudadela medieval italiana ahora es un mundo de fantasía genérico de videojuego android que permite representar tantas mujeres como hombres y personajes de todas las minorías étnicas. Me imagino que tras haber convertido a cada personaje en una representación racial, ya no pueden darle a nadie cara de loco o usurero sin arriesgarse a que los llamen racistas, de ahí que hayan buscado adrede un estilo neutro (y aburrido y anodino y genérico y falto de encanto).
ComponentesLa segunda cagada es que las cartas de personajes de la nueva edición tiene tamaño tarot. Un tamaño no-estándar de cartas complica encontrarles fundas, y enfundar los personajes es muy importante en este juego. Los personajes se barajan y manosean constantemente, y si se marcan o rasgan, los demás pueden adivinar qué nos estamos llevando.
Ah sí, han incluído unas fichitas adicionales para marcar qué personaje se activa a continuación, por si eres incapaz de contar del 1 al 9 (es lo que hacíamos nosotros) hasta que te aprendes cada personaje por su nombre y luego ya siempre vas de memoria: Asesino, Ladrón, Mago... Completamente innecesarias en mi opinión.
La corona es una miniatura de plástico. Es bonita e invita a manosearla y juguetear con ella. Abre spoiler para verla que la imagen es muy grande:
FormatoLa tercera y mayor cagada es que Ciudadelas
es un filler y por tanto es estupendo que su versión original venga en un tamaño de caja pequeño (la "silver-line" de FFG). Ampliar su tamaño hasta el "medium square box" es una burrada.
Cuando una editorial coge un filler y le mete aire en la caja para convertirlo a un tamaño enorme, se lo carga. Porque entonces deja de ser un juego que puedas llevar en el bolsillo y que te permita jugar partidas en lugares inusuales donde te alegres de estar jugando juegos de mesa cuando normalmente no podrías. Al engordar la caja, Ciudadelas se convierte en un juego cuyas partidas hay que planear de antemano. Y pasa de ser un filler divertido a un juego de sobremesa flojo y sosaina.
El Ciudadelas Original tuvo un tamaño Silver Line: (10.4 x 19.6 x 3.8 cm)
Después salió una edición engordada deluxe (26.0 x 20.0 x 4.0 cm) que ya sufría este problema.
Esta nueva edición llega al tamaño Ticket to Ride (29.7 x 29.7 x 7.1 cm)
Hemos pasado de esto:
A esto otro:
La guinda del pastel es el reglamento que coincide con el tamaño de la caja, impidiéndote buscarle una caja más pequeña para transportarlo.
Esto mismo ya lo sufrieron juegos como Arcana o Red November, que molaban mucho como minijuegos, pero como juegos de caja gorda no ven mesa porque ya no puedes llevártelos encima y cuando quedas para jugar algo de caja grande, hay mil mejores opciones.
PrecioLa cuarta y última cagada es el precio. A pesar de estar llena de aire, la caja grande se ha utilizado de excusa para inflar hasta 30€ el precio de un juego que siempre ha costado 20€.
ConclusiónCiudadelas 2016 es un ejemplo de libro de cómo la corporativización de los juegos de mesa enmierda las ediciones de los buenos juegos y hace que estos pierdan valor. Han inflado la caja de aire, cargándose su portabilidad, para poder ponerlo más caro. Han retocado cuatro reglas para incentivar a que lo recompremos. Y han sanitizado la ambientación, cargándose la atmósfera, estilo y trasfondo originales, para mantenerse en esa zona políticamente correcta que tanto gusta a los abogados de las corporaciones.
La edición que debéis comprar es esta otra: