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Las características superficiales de los juegos son importantes, hasta cierto punto. El arte, los componentes, el idioma, el precio, la licencia nostálgica, el modo solitario, tutoriales online, poder jugar con los pekes... influyen y hacen los juegos más atractivos y cómodos.Sin embargo, no hay que perder la perspectiva de que el juego en sí es más importante que todo lo anterior.Si no quieres perderte joyas,de vez en cuando toca comprar un juego en otro idioma y pegarle pegatinas. O imprimir un rediseño gráfico de matute para mejorar el arte que trae. O comprarte otro juego para canibalizarle las miniaturas. O leerte un reglamento enorme. Esto antes se veía normal y era parte del hobby. Ahora, cada vez más los aficionados deciden qué comprar haciendo "checklists" de características accesorias, poniéndolas por delante de qué ofrece el juego como juego en sí. Y lo hace tanta gente, que el problema ha dejado de ser que algunos se pierdan algún buen juego. El problema es que se ha creado una "barrera editorial" donde si no cumples X requisitos ni siquiera te merece la pena intentar publicar por mecenazgo.Yo creo que nos hemos vuelto demasiado exigentes con cosas secundarias, y demasiado poco exigentes con la primordial, los juegos en sí.
Lo dices como si fuera culpa nuestra xd.Antes sacaban juegos como el Caos en el viejo mundo por 50€ que eran buenos juegos a un precio asequible. Ellos mismo decidieorn sacar Blood Rage que es una reimplementación venida a menos con mejores minis y el doble de precio, pero oye la culpa es nuestra porque nos fijamos en nimiezas como el precio o lo visual.Que saquen juegos como los de antes a los precios de antes. El tema del idioma no me parece un tema accesorio. Y menos si es un juego narrativo.
¿Quiénes fueron lo que les tiraron el dinero a la cara con el Blood Rage? ¿Quiénes campaña tras campaña de Zombicide les tiran el dinero a la cara?No digo que sea tu caso, pero muchos de los que ahora se quejan son los que han contribuido a estar como estamos ahora.